Houston, Texas.- Una mujer de 23 años sedó a un niño mexicano de cinco años para contrabandearlo a los Estados Unidos por el puente de San Luis, en Arizona.
Los hechos ocurrieron la madrugada del 29 de abril cuando los oficiales se encontraron con la mexicana, residente legal en Estados Unidos que presentó un certificado de nacimiento asegurando que se trataba de su hijo.
Pero a los agentes les pareció extraña la postura en que dormía el niño en el asiento trasero y que no aparentaba tener la edad que decía en el certificado.
A medida que avanzaba el examen, los oficiales de la CBP descubrieron que no existía parentesco entre la mujer y el menor y que el certificado de nacimiento, aunque legítimo, no pertenecía al menor.
“Además, el menor, un niño de 5 años, era ciudadano mexicano y no contaba con documentos de entrada válidos”, dice un boletín de CBP.
La mujer declaró que le había administrado sedantes para dormir al menor antes de intentar cruzar para evitar ser detectado.
“Sedar a niños es una táctica peligrosa y común que vemos utilizada por traficantes de personas para evitar ser detectados en nuestros puertos de entrada”, declaró Chris León, director del puerto de San Luis.
La mujer fue detenida el auto asegurando y el menor mexicano puesto bajo resguardo mientras se localizaba a sus familiares.